El MACA recupera los personajes y máscaras diseñados y pintados por el artista catalán para el montaje teatral Mori el Merma del grupo La Claca, pertenecientes a la Diputación y ocultos al público desde 1980.
Joan Miró se puso la bata blanca y pidió una escoba y un cubo de pintura negra. Entonces se acercó a una gran tela estirada en el suelo y empezó a pintar dando vueltas al gigantesco pincel. Ese en apariencia sencillo gesto dio como resultado una espiral con la que el artista dejó plasmado en un telón el espíritu de Ubu, el personaje teatral ideado por Alfred Jarry convertido en paradigma de los dictadores del siglo XX. Pero esa mañana de marzo de 1977 empezó algo más. En ese momento dio comienzo una historia que dura ya 40 años y que supuso la incursión teatral más importante de Miró.