Los antecedentes de los museos, tal como son conocidos en la actualidad, hay que buscarlos en las galerías, entendidas como aquellos espacios de carácter científico de los alemanes, y de contenidos artísticos en el caso de Italia que proliferaron entre los coleccionistas a partir del siglo XVI.
Las segundas preferentemente fueron destinadas a albergar fondos diversos de la antigüedad clásica.